jueves, 18 de septiembre de 2014

BUENILLO Y MALILLO





Malillo salió de su casa pisando charcos.



Buenillo salió limpito y con la tarea hecha.



Malillo no faltó al trabajo (que no le gustaba), y mientras sonaba a descanso, soñaba en la Isla de los Placeres.



Buenillo trabajó el doble y buscaba ser poderoso, sabiendo cómo era él, del bajo astral, sin gracia, ni imaginación.



Malillo se lió con su diecinuevemil ochocientos ochentayochoavo amante -con el que  fingió sentirse muy amado- al salir del trabajo.



Buenillo comió la comida preparada por su marido, se acostó y tuvo una siesta plagada de pesadillas.



Malillo aspiró coca y humo, y licores baratos en el tropel de luces de la exuberante noche.



Buenillo probó el alcohol en el círculo de frases hechas y bailes de nieve.



Malillo sintió todo el peso de su existencia al quedar solo en su habitación, rota y desordenada.



Buenillo, con indiferencia, se acostó con su marido, o con él mismo, lo mismo da.


Buenillo y Malillo miran la misteriosa grieta de la pared, en el techo de su cama, cuando hasta los relojes duermen. 





domingo, 14 de septiembre de 2014

QUIZASÍ Y QUIZANO: PRIMAVERA. Sainete cómico

QUIZASÍ Y QUIZANO: PRIMAVERA


 (QUIZASÍ en una habitación, comiendo.  

 QUIZANO con maletas sentado en el banco de 


una estación. Al fondo, una puerta con letrero, 

es el W.C. de la estación.

 Quizasí desde un pc. y Quizano con móvil y cascos)

QUIZASÍ.       ¡Eooooooo!
QUIZANO      ?(Sacando una pequeña pancarta con el símbolo de interrogación)        
QUIZASÍ.       ¿Estás vivo, QUIZANO?
QUIZANO.     Sigo vivo, pero ni idea de quién eres…
QUIZASÍ.       Soy yo, QUIZASÍ…
QUIZANO.     ?(vuelve as sacar la interrogación)

QUIZASÍ.        El profe de diseño, ¿recuerdas?
QUIZANO.     Ah,  maricón, no caigo. A ver, sigue, dame detalles…
 QUIZASÍ.      El que pone nombre a las gatas…

QUIZANO.     Aaaaah, ¿eres tú? ¡QUIZASÍ!
QUIZASÍ.       El mismo.
QUIZANO.     Hálaaa ¿En serio?
QUIZASÍ.       ¡Siií! ¿Qué haces?
QUIZANO.     Mira que eres capullo
QUIZASÍ.       ¡Jajajaja!

QUIZANO.     Perdí tu número, porque volví a estar sin móvil desde el octubre pasado. Se me cayó en el retrete. Tardé tres meses en comprarme otro con chat. ¿Y qué te has hecho, que no te conoce ni tu madre?
QUIZASÍ.       Un tintazo, ná más que eso. El resto está todo igual.
QUIZANO.     No, que también te has rapado. Has pasado de melena-rala-alternativa a mari-rapada.

QUIZASÍ.        Sí, rapado del todo. Ya te digo, es más cómodo así.
QUIZANO.     Yo me he pasado 20 años mari-

rapada, y ahora que quiero pelo, ¡ya no tengo! Una pena.
QUIZASÍ.       Ajammm…
QUIZANO.     ¡Tábatha, te necesito!
QUIZASÍ.       ¿Me necesitas? ¿Y eso?
QUIZANO.     Estoy en la estación de autobuses. Si te pasas se agradecerá. Aunque solo estaré hasta las 9...

QUIZASÍ.       ¿Y qué haces allá?

QUIZANO.     Anda, vente un rato(mimoso) capullo… Y me restriegas el paquete por la cara.
QUIZASÍ.       Las hormonas y su indescifrable decanato. Ellas rigen la hirsutez de nuestros cuerpos. No puedo ir ahora a la estación…

QUIZANO.    ¡Anda!...Una hora exactamente me queda... Estoy depilado.

QUIZASÍ.       Huyyyyy, y rasparás y todo, ¡y más de un día para otro! 

QUIZANO.     Me operaron de dos hernias (ombligo e inguinal) el 31 marzo en la Cruz Rosa, aquí, en la ciudad. Todavía no me ha crecido vello lo suficiente.

QUIZASÍ.       Lo siento, qué fuerte… ¿Y eso? ¿Del ejercicio?
QUIZANO.     La agrandé terriblemente, con mi buen hacer gimnástico. Ahora, después de 2 meses en absoluto reposo, tengo las carnes flojas.
QUIZASÍ.       Debe doler. Pero, dime: ¿vas de regreso al pueblo?¿Cómo has escapado de tu montaña mágica? ¿Venías a ver a algún macho dominatriz?

QUIZANO.     Acabo de llegar en tren desde la capital.

QUIZASÍ.       ¡Ahmmm la capital! De recorrer tugurios de hombres abisales, hum.

QUIZANO.     ¡Calla, qué cerdos!…Qué rabos gordos y duros en la penumbra.

QUIZASÍ.       Seguro, como manojos de jureles.

QUIZANO.     ¡Cierto!, el viernes dos señores rociaron mi lampiño cuerpo con su semilla.
QUIZASÍ.       Tu ritual de primavera. Estarías en tu fluido natural, como una diosa.

QUIZANO.      ¡Vente a la fiesta bear!

QUIZASÍ.        ¿Hay una fiesta bear? ¿Dónde?¿Cuándo? Yo solo voy si hay orgía.
 QUIZANO.     Villabear.comYo sí que  iré, ya he pagado (Le envía el folleto de la fiesta)




QUIZASÍ.         ¡Pero si es en tu pueblo! ¡Qué modernas!¿Cuándo es el festival osezno?
QUIZANO.      Regarde-le sur le lien que je viens de t'emvoyer.

QUIZASÍ.        Me gusta cuando me susurras on Français.
QUIZANO.     155€ tout y compris.

QUIZASÍ.        Creo que ya estaré libre en las fechas.

QUIZANO.      Hotel y todo por ese precio (Pausa intrigante) ¡Mira qué elemento me he comprado por 30€!



QUIZASÍ.       ¡Oh, ya sé lo que es....!

QUIZANO.     Ahhhh...

QUIZASÍ.       Ooohhhhhh...

QUIZANO.     Ni mota de polvo en mi vida.

QUIZASÍ.       Quell merveille! (QUIZANO muestra por el whatssap una  foto con tres aspiradoras, cada una de una clase y color).
QUIZANO.     ¡Y las tres son mías!

QUIZASÍ.        Comment s'appelle?

QUIZANO.     Hoover Elite.

QUIZASÍ.       ¿Esa es la amarilla?

QUIZANO.     La azul claro. Es la nueva niña. La amarilla es la Hoover Dial-a- Matic de 1968.

QUIZASÓÍ.    Preciosísima.

QUIZANO.     Pronto la olvidaré en mi cementerio de aspiradoras.
QUIZASÍ.       Bueno, piensa que alguna vez alguien montará un espectáculo radical con tus aspiradoras. Hombres danzando desnudos al son de los movimientos de las máquinas sobre el parqué. ¿Y la azul profundo?

QUIZANO.      ¿La azul profundo?  Panasonic (Nueva foto, esta vez de la serie Embrujada) ¡Samantha (Elisabeth Montgomery) con la Dial-a-matic en la serie Embrujada!




QUIZASÍ.       Genial, Samantha. Representa mi más tierna infancia…

QUIZANO.     Nada de parquet, moqueta-moqueta…

QUIZASÍ.       Eso, moqueta.

QUIZANO.     Lo moderno siempre es la moqueta, lo moderno tiene pelo.

QUIZASÍ.       ¡Viva la modernidad hirsuta!

QUIZANO.     Suelo con pelo...

QUIZASÍ.       Paredes con pelo...

QUIZANO.     Claaaaaro...

QUIZASÍ.       Mobiliario velludo...

QUIZANO.     Como en la nave espacial de Barbarella (Pausa) Tengo ganas de evacuar…

QUIZASÍ.        Pues ya sabes, al lado de la cafetería…

QUIZANO.      (Con fastidio) Sí, claro, con la mochila, y la aspiradora decapitada en dos bolsas…¡Pero mear sí que puedo!…

QUIZASÍ.        Cabe todo, lo suyo es jugar con el espacio... ¡Ten cuidado con el móvil!

QUIZANO.      Ay, lo mío me ha costado… (Va al W.C., entra con dificultad con las bolsas. Se oyen los sonidos propios del water closed. Apertura de tapa, ruido del cinturón al caer, chorrito de pís, el agua de la cisterna ruidosa, etc. Al cabo, sale QUIZANO, que se sienta en el banco y advierte algo tras la cuarta pared) Oh-oh…Maricones en la bus terminal. Grrrr…Tengo uno que se acaba de sentar justo enfrente…
QUIZASÍ.       ¿Y cómo es él?
QUIZANO.     Musculoso y de desagradables ojos azules.

QUIZASÍ.       ¿Te ha visto salir de los retretes?

QUIZANO.     Estoy en un banco sentado. Está frente a mí, a unos 3 metros…

QUIZASÍ.       Algo querrá, algo querrá... ufff, qué ganas de follar me dan a la cena (Tocándose).

QUIZANO.     Pues yo, llevo semanas con nulas ganas. Mi culito está cerrado a cal y canto, ¡y así seguirá!

QUIZASÍ.       Ohhh. ¡Tu culito es tan bonito! ¡Es una penita pena.

QUIZANO.     Me he vuelto maricón asexual. Indiferente e impasible a miembros viriles ajenos.

QUIZASÍ.       Con lo bien que se llevaba mi miembro con él.

QUIZANO.     Cierto es.

QUIZASÍ.       Y lo bien que se compenetraban.

QUIZANO.     Qué hermoso es tu pene: Lo siento aún rozando mis prietas y velludas nalgas...

QUIZASÍ.       Ya, es deleitoso follar contigo.

QUIZANO.     ...Hasta que, de repente, como quien no quiere la cosa, tu verga se abre paso sin dificultad hacia el fondo de mi gruta del placer….¡Oh! ¡No, no, noooooo, tengo pensamientos impuros y podría echar por alto mi estatus de chico virgen y asexual! ¡Y eso sí que no!

QUIZASÍ.       ¡Cuánto polloncerío desperdiciao!, ¡ay!
QUIZANO.     ¡A ver!, viviendo perdido entre montañas, uno o se adapta o se vuelve loca. (QUIZANO, envía una foto de una clásica niña  mala de la TV. En nuestro caso, es Nelly Oleson).




QUIZASÍ.       NELLY!!!! La más mala de todas. ¡¡¡Love her!!!
QUIZANO.     Sí, mala jaaja. ¡Fantástica Nelly!

QUIZASÍ.       ¡Qué buenos recuerdos!

QUIZANO.     Así hemos salido todos de maricones, jaaja...

QUIZASÍ.       ¡Claro! ¡Porque así ha de ser!
QUIZANO.     Todos queríamos a Nelly en el fondo. ¡Y qué repelente, la Laura!...

QUIZASÍ.       Marcó un antes y un después de las malas de la tele.

QUIZANO.     Laura y Mary eran empalagosas. Era toda la familia un asco. (QUIZANO envía una foto de un papi vaquero del Viejo Oeste, en este caso, de Víctor French) Mmmh. ¿Qué te parece? Era amigo de Mikaela Landon en la serie.



QUIZASÍ.       ¡¡¡Victor French!!! Qué morbazo tenía…

QUIZANO.     Mmmmmm,  ¿morbazo?, yo que Laura, ¡me dejaba violar! Siempre fue mi ilusión de pequeño, ¡que un rudo vaquero barbudo o bigotón me follara vivo!




QUIZASÍ.       ¡Qué precocidad, Quizano! ¡Si alguien te leyera! 

QUIZANO.     ¿Y qué? Además, él no fue el primero. El primero fue el Hermano Malasombra, el del bigote fino, ése, el de los Chiripitifláuticos. (Envía la imagen).




QUIZASÍ.       Jó. Yo los detestaba, me daba más morbo el loco romano con el león… ¿cómo se llamaba...?
QUIZANO.     Era lo más parecido a una leatherona que yo podía imaginar…siempre he sido un niño pervertido.

QUIZASÍ.       Lo sé lo sé… (QUIZASÍ le envía la imagen de Filetto Capocomico con Leocadio Augustus Tremebundus) ¡Filetto Capocomico! con Leocadio Augustus Tremebundus… su león de peluche . No me digas, que no es pa comérselo…hmmmm...




QUIZANO.    Amo los bigotones desde infante. 

QUIZASÍ.       Me too. Mi primer polvo fue un señor con bigote. En una cruz de mayo, en Granada. Muchos años después me lo encontré  en una orgía. Le dije entonces que él había sido mi primer  amor. Se cortó un montonazo y se fue corriendo de allí... Qué extraño. Habían pasado casi 30 años, pero se conservaba idéntico, solo que canoso. ¡¡¡Y con el mismo bigote!!! Apenas nos escribimos unas cartas y nos vimos tres o cuatro veces, pero aún conservo aquellas misivas de amor escritas a mano, con su letra tan pulcra y redondita. Me quedé un poco consternado, en la fiesta. Tuve muy poco tacto. Se lo dije delante de unos cuantos orgiantes, previamente al acto, mientras se iban desnudando: <<¡Ramón!, ¡eres Ramón!, ¡mi primer amor...!>>

QUIZANO.    Ayyy, ¡qué bonitooo! 

QUIZASÍ.      Me miró, se puso nerviosísimo, cogió la ropa y se fue. ¡Ay, lo que me entró por el cuerpo! Quizano, ¿nunca te  ha ocurrido nada parecido?

QUIZANO.    Curiosamente,  otro Ramón (éste de mi edad y de hiper-velludas piernas también) fue  mi primer amor. Por cierto, lo veo mucho últimamente... Pero ni lo miro ni me mira, del ascazo que me da, el tío.
QUIZASÍ.       Todas se llaman Ramón.
QUIZANO.     Sí…
QUIZASÍ.       Y de tu pueblo…¡Qué pena!, si viviéseis en la Metrópoli, quizás os miraríais de otra forma!
QUIZANO.    Puede, yo soy una mari muy desenvuelta para ser de pueblo...
QUIZASÍ.      ¿Sigue con su bigote?

QUIZANO.    No, mi Ramón carecía de mostacho, solo tenía vello en las piernas. 

QUIZASÍ.     Ah, sí, ya me dijiste, y...¿Qué hicísteis la primera vez? Éste me la intentó colar sin éxito. Comió de mi falo y bebió mi esperma. La primera que probé fue la suya, tenía el sabor del mar.
QUIZANO.   Yo se la mamé al mío durante un buen par de años. Básicamente eso. Hasta que me harté; soy de poca paciencia y borde en extremo cuando alguien lo merece. Vamos, una desagradable de tomo y lomo…

QUIZASÍ.     ¿Qué edad tenias? Yo 21.
QUIZANO.   Yo 18. La última vez que quedé con él sin hacer nada, fue... hará... unos 20 años.
QUIZASÍ.     ¡Cómo pasa el tiempo! ¡Yqué tarde llegamos al sexo! 
QUIZANO.    ¡Siiií, qué tardeee! ¡Y qué tontos!
QUIZASÍ.      ¡Siiií, qué tontos!

QUIZANO.    ¡Qué tontos! Me hubiese gustado empezar mucho antes, con 15, ¡o incluso 12…!
QUIZASÍ.     ¡Y con alguien mayor y peludo!
QUIZANO.   Siiiií. Santitos que fuimos. Con lo bien que lo habríamos pasado de niños chupándosela al lumpen: obreros, chonis, albañiles policías…

QUIZASÍ.     Fuimos dominguitos-sabios que entregábamos nuestra virginidad al martirio, matándonos a comernos el coco.

QUIZANO.   ¡Tontos!…  Si no hubiese sido tan beato, yo hubiera ido con mi culito hidratado y muy dilatado para mi tierna edad, colmado de fluido viril. 
QUIZASÍ.     ¡Si te oyera un putinita!

QUIZANO. ¿Pederastia? Qué va. ¡Práctica ancestral mediterránea! Mira esos curas.



QUIZASÍ.     Sí... yo hubiera sido mucho más feliz cediendo a las miradas impúdicas de mis compañeros y levantando el paño de pureza de los crucifijos. Había un Cristo en la Iglesia de Fátima con pelo rubio y cuerpo atlético. Parecía dormido. El paño era de tela. Había días que mientras le rezaba soñaba que le arrancaba del tirón el trapo. 
Y polucionaba todas las mañanas sin darme cuenta; y mi madre, impertérrita, mudaba a diario las sábanas…Si no hubiese sido tan beato...
QUIZANO.   Y todo porque en las casas no se hablaba de eso.  Pero el caso es que yo era un niño con mucha necesidad de hombre-hombre; de una manaza fuerte y peluda, guiándome.
QUIZASÍ.    Yo me enamoré de un primo mío francés. Llegó adolescente, un verano. Era rubio, como el Cristo, y muy educado. Se llamaba Marc Henry; yo tendría unos 10 años, y él unos 20. Nos bañábamos juntos en la mar y nos mirábamos, extrañados. Me golpeaba el corazón bajo las olas.

QUIZANO.    Qué bonito. Un hombre para tus ojos de niño.
QUIZASÍ.      Sí. Por eso hay que incendiar todo templo que no sea consagrado a Venus.
QUIZANO.    Yo me enamoré de Rogelio: Un chulo de la edad de mi hermana que tenía en un altar. Pelo largo liso y bigote. Hace pocos años, volvía yo del Mercadona de comprar un Don Limpio y, por la acera de enfrente, veo un tío que me resulta super-atractivo...¡ Coño, Rogelio! Tanto y tanto lo miré, que al final me dijo adiós. Creo que me reconoció. Me sentí viva y contenta jajaja: Como una adolescente que lleva en su carpeta de gomas fotos de Pedro Marín (U otro cantante juvenil al uso).
QUIZASÍ.     Ese sí que sigue fantástico. El tiempo no pasa por él. Me da a mí que pactó con el diablo. Lo tengo agregado en mis redes. Qué hombre tan sicalíptico.
QUIZANO.  Yo era más de Pedro Mari Sánchez.  (Se oye el ruido del autobús) Huy, ahí viene el bus. Te dejo, que he de regar mis macetas.

QUIZASÍ.   ¡Anda y yo! Pasa buena noche, QUIZANO (Le envía la foto de Pedro Marín y sale).




QUIZANO. (Quizano le envía un vídeo. Sale de escena, se oye el autobús partir con la canción de fondo.  Es "Gigliola Cinquetti - No tengo edad (En español)" http://youtu.be/7r87MMSdNug).


https://www.youtube.com/watch?v=7r87MMSdNug